(fuente: www3.unileon.es)
A pesar de los nombramientos habidos hasta el momento, que parecen cubrir la demanda y necesidad de los centros (no he oído lo contrario) me siguen pareciendo escasos los referentes a la atención a las neae. Insuficiente si tenemos en cuenta que en algunos centros educativos (y públicos) el papel del especialista en Educación Especial ha quedado relegado a una "anécdota".
Tal vez con la idea de recortar en nóminas, tal vez con la idea de ajustar un poco lo establecido en el papel o porque, con el paso de los años, en vez de darle más y mayor importancia a la atención a la diversidad, ésta parece que decrece a cada curso escolar, no veo que se considere dicha atención con el respeto que se merece.
Ahora que ha salido las instrucciones para el presente curso escolar 2012-2013, se me ocurre al leer su contenido que puede ser una buena forma para justificar la presencia del especialista en Educación Especial más allá de lo establecido por los decretos oportunos. Y quien sabe, tal vez usando la normativa como escudo conseguir que ese docente no desaparezca del estadillo.
¿Por qué no justificar su presencia más allá del número de ACUS?.
Leo por encima....
"La autonomía de la que disponen los centros educativos permite que cada centro educativo pueda contribuir mediante su propio valor añadido a la mejora del éxito en todo el sistema educativo" (pues si es así, una mejora del éxito es la atención real y de calidad a las neae)
"La participación en este proceso de mejora continua del éxito escolar hace necesario que los centros educativos procedan cada curso escolar a la actualización de todos aquellos planes y proyectos que conforman su identidad organizativa incorporando medidas que contribuyan a elevar el éxito escolar de su alumnado". (una medida es la atención a la diversidad, si creamos un proyecto nos aseguramos al especialista con todo su horario de atención)
"La elaboración del proyecto educativo del centro (artº. 121), así como la elaboración del proyecto de gestión (artº. 123) y las normas de organización y funcionamiento (artº. 124), junto a la programación general anual (artº.125) y el resto de planes y programas que los desarrollan, constituyen la expresión de la mejor respuesta educativa que cada centro puede ofrecer a su alumnado. De aquí la importancia y la necesidad de lograr que cada uno de esos documentos sea la expresión de un firme compromiso de toda la comunidad educativa, así como la fuente de decisión en cada una de las acciones que se desarrollen en los centros". (Por lo que si se introduce desde esos documentos básicos la atención a las neae, no hay forma de justificar su ausencia en los centros escolares)
Dentro del proyecto de gestión de los centros educativos se contempla la siguiente actividad. "Acciones para la prevención de las dificultades de aprendizaje en el primer ciclo. A una sola maestra o maestro. 2 h lectivas" (que pueden plantearse a otorgar a especialista en EE con el fin de cubrir horas si no se cumplen los nº de ACUS)
"En los centros de Educación Infantil y de Educación Primaria de 9 o más unidades que recojan en su estadillo de planificación de las necesidades específicas de apoyo educativo (NEAE) 5 o menos escolares con adaptación curricular (AC) y ninguno con adaptación curricular significativa (ACUS), el maestro o maestra de apoyo a las NEAE dedicará, de forma prioritaria, al menos el 50% de su horario a realizar intervenciones con aquellos escolares de Educación Infantil de 5 años, de 1.º y de 2.º de Educación Primaria que presenten alguna dificultad en el avance de sus aprendizajes". (por lo tanto el papel del docente de especial puede estar más allá del aula de apoyo, cubrir su horario, atender desde los primeros momentos, realizar una atención temprana que pueda hacer mejorar las dificultades que se presenten)
Por no hablar de la posibilidad de crear y desarrollar proyectos por parte del especialista en Educación Especial que repercutan en la dinámica diaria del centro escolar, así como asumir otros ya establecidos como es el PEDREA (no sé si sigue vigente con esto de los recortes).
Pertenezco a esa corriente en la que se apuesta por la presencia de un especialista de Educación Especial como mínimo en cada centro educativo, entendiendo que su papel debe saltar fronteras y no quedarse estancado en la mera atención desde el aula de apoyo.
Y por supuesto, que este docente no debe ser el comodín de la baraja que permita cubrir las ausencias o bajas temporales del resto de docentes. La atención a las neae no es una anécdota, no es un juego, no es algo banal, es toda una acción de intenciones.
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